59.- Para qué salir de tu zona de confort

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¿Para qué necesito salir de mi zona de confort?

Para valorar más lo que tengo
Para darme cuenta de que hay cosas mejores
Para aprender a solucionar problemas y a desenvolverme en situaciones hostiles
Para explorar nuevas opciones
¡Para conseguir mejorar!

Salir de tu zona de confort es la manera de crecer y de sentirte bien.

Ejemplos de situaciones que te hacen salir de tu zona de confort

Viajar
Cambiar tu estilo de vacaciones
Hacer deporte
Empezar a hacer deporte
Cambiar de colegio, cambiar de trabajo, …
Cambiar de coche
Hacer una dieta
Dejar algún hábito poco saludable (enganche al móvil, comer dulce, comer por la noche, no moverte en todo el día, enganche a la tele-basura,…)
Ir a reuniones o citas que no te apetecen.

Objetivo salir de tu zona de confort

Párate a pensar en lo que haces en tu día a día, y busca «eso» que no te gusta, pero lo haces.

Céntrate solo en una de esas cosas que te gustaría dejar de hacer, bien porque no te convienen, porque no son saludables, porque te perjudican,…pero que tienes como un hábito y no puedes dejar.

Sal de tu zona de confort, y busca otras opciones para dejar de hacer eso que quieres dejar.

Busca ideas para sustituir esa acción.

Piensa en cosas que podrías hacer para sustituir «eso».

Ideas para sustituir un hábito que no te gusta

Si tu problema es que comer mal a diario, sal a comer fuera de casa, en un restaurante o en un parque y llévate comida saludable. Una ensalada en el parque puede saber a gloria.
Si tu problema es que por las tardes no paras de mirar el móvil o la tele porque no tienes nada más que hacer, vete a dar un paseo mientras que escuchar tus podcast favoritos.
Si te sientes solo, ofrece ayuda a gente que pueda necesitarla.
Interacciona con la gente de tu alrededor, piensa en los demás y sustituye ese mal hábito que tienes por algo que sirva para mejorar esta sociedad.
Ofrécete voluntario cuando soliciten alguno.