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Aprende a controlar la grelina y adelgaza más rápido

¿Sabías que la grelina es una hormona que puede hacer que no adelgaces?

Todos tenemos claro que adelgazar es complicadísima. Muchos factores entran en juego además de los alimentos que te llevas a la boca, y no solo las tentaciones que surgen cuando sales con amigos, cuando estás aburrido en casa, la falta de actividad física, sino que algunas hormonas que generamos pueden luchar en nuestra contra si queremos adelgazar.

Una de las cosas que nos hacen fracasar en nuestro intento de hacer una dieta saludable es el hambre y la sensación de hambre que sentimos muchos veces sin estar justificada, y esto es porque el hambre no depende de nuestra psicología, al menos no al 100%, sino que es un proceso mediado por hormonas.

Una de las hormonas que más nos influye a la hora de controlar la sensación de hambre es la grelina.

En el capitulo de hoy escucharás mucho sobre esta hormona, la ‘hormona del crecimiento’ que además es la encargada de comunicar al cerebro si tenemos hambre o no. Te contaré cómo evolucionan los niveles de grelina en tu organismo cuando comienzas a hacer dieta.y cómo detenerla.

Cómo las hormonas del hambre controlan la pérdida de peso y lo que puedes hacer ahora mismo para volver a controlarlas.

La leptina y la grelina parecen nombres de El Señor de los Anillos. Pero en realidad son hormonas que regulan la sensación de hambre y saciedad.

La grelina es liberada por el estómago cuando está vacío, indicando al cerebro que ha llegado el momento de comer. La grelina es de acción rápida y debería disminuir drásticamente cuando se está lleno. Está en su punto más alto justo antes de comer y en su punto más bajo aproximadamente una hora después de la comida.

La leptina, por su parte, significa “delgado” en griego, y te permite saber cuándo es el momento de dejar de comer. Es una hormona liberada por las células grasas que indica al cerebro cuándo el cuerpo ha tenido suficiente combustible y puede empezar a quemar grasa para crear energía. Es una hormona que equilibra la energía a largo plazo y se cree que es la más importante de las dos en términos de apetito, producción de energía, aumento y pérdida de peso.

En un cuerpo que funciona perfectamente, la grelina nos dice que comamos para no morir de hambre, y la leptina nos dice cuándo debemos parar.

Por desgracia, las hormonas no siempre están en un equilibrio tan perfecto. La obesidad, las predisposiciones genéticas o los problemas de salud, la dieta, el sueño y el estilo de vida pueden desestabilizar el hambre y la saciedad, así como comprometer la eficacia del funcionamiento de nuestras hormonas del hambre. La buena noticia es que hay muchas modificaciones que puedes hacer para que tus niveles de leptina y grelina vuelvan a estar donde te gustaría.

¿Qué es la grelina?

La grelina es una hormona que aumenta el apetito. La libera el estómago y viaja a través de la sangre para indicar al hipotálamo que el cuerpo necesita combustible, así como para conservar la energía y buscar comida.

Normalmente, la grelina se libera cuando el estómago está vacío. Los niveles de grelina son más altos justo antes de comer, más bajos una hora después de haber comido y permanecen bajos durante unas tres horas.

Algunas personas están genéticamente predispuestas a liberar más grelina, y por ello tienen hambre más rápido.

¿Cómo puedo optimizar el funcionamiento de la grelina?

Los estudios revelan que en las personas con obesidad, la grelina disminuye sólo ligeramente después de comer, lo que puede llevar al cerebro a pensar que se necesita más comida y conducir a comer en exceso. Las estrategias para ayudar a mejorar el funcionamiento de la grelina incluyen

Evitar el azúcar y el jarabe de maíz de alta fructosa, que pueden perjudicar el descenso de la grelina después de comer.

Comer muchos carbohidratos saludables como los cereales integrales, así como proteínas magras como el pollo, el pescado y el tofu. Estos alimentos pueden disminuir los niveles de grelina y hacer que te sientas lleno durante más tiempo.

Una vez más, ¡dormir lo suficiente! Dormir menos de ocho horas puede aumentar los niveles de grelina, lo que provoca un mayor apetito y unos antojos más difíciles de controlar.

Mantenerse bien hidratado. El Dr. Sands dice: “Una forma de aumentar el volumen del estómago es beber agua, sopas y caldos, así como alimentos llenos de agua, como ensaladas, frutas y verduras. Un estómago lleno disminuye la señal de grelina”.

Si sospechas que tus hormonas del hambre no están funcionando de forma óptima, también es buena idea pedir una cita con un endocrino para hablar de tu salud, tu dieta, tu estilo de vida y tus factores genéticos, y determinar los tratamientos adecuados para que vuelvas a sentirte bien.

Los métodos principales para detener la grelina y evitar tener hambre

  • Priorizar el sueño.
  • Aumentar la masa muscular.
  • Consumo de proteínas.
  • Quemar calorías

Nada más por hoy, pero puedes seguir aprendiendo a comer saludable visitando más entradas del blog.

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